Durante 24 años he dedicado mi trabajo al arte y la cultura, proponiendo actividades y eventos , creando organizaciones y talleres culturales, ejecutando proyectos y apoyando actividades culturales en todos los ámbitos del arte y la cultura, tanto a nivel comunal, regional, nacional e internacional.
Hoy cuando el país ha entrado en un cambio cultural me parece de suma importancia plantear esta propuesta artística cultural de desarrollo para la comuna que compartimos con en el Centro Cultural Artístico y del Libro “ dalca “. Por ello esta propuesta que insta al conjunto de la sociedad local a hacer de Puerto Montt una ciudad con una imagen artística cultural potente y con un mensaje descentralizador que de prioridad al ámbito de las poblaciones.
Esta es una propuesta que recoge y reconoce el esfuerzo, la experiencia
anteriores, provenientes de los integrantes del mismo Centro y de los distintos sectores -público, privado y de la sociedad civil- que en diversos contextos han abogado por convertir la promoción de la cultura y el arte en una tarea fundamental. En el caso del presente documento, el Centro Cultural, Artístico y del Libro se abrió a la opinión de actores que no están, necesariamente, representados en agrupaciones culturales o instituciones gubernamentales, no son los actores que nos hemos acostumbrados ver durantes estos años, sino que aquellos anónimos artistas que deambulan en las distintas poblaciones, hospitales, canchas de fútbol, en las esquinas, en las construcciones, etc. Aquellos que todavía al parecer no se sienten parte del sistema democrático. Compartieron con generosidad sus aportes y han sido considerados con gratitud.
La acción cultural no debe ser patrimonio de unos pocos sectores o élites, sino que ella recorre la ciudad en su conjunto en cualquiera de sus manifestaciones cotidianas.
Sin cultura no es posible valorar nuestro patrimonio histórico, arqueológico y paleontológico; sin cultura no es posible hacer del turismo un recurso en beneficio de nuestros habitantes; no es posible el crecimiento económico, ni el desarrollo social; no es posible la integración de nuestras apartadas localidades en un destino común.
Sin una cultura social no es posible concebir nuestro futuro.
Igualmente, esta política no pretende partir de cero, sino que es el paso natural después de lo que se ha hecho durante estos años , a través del apoyo de la municipalidad o el aporte importante de los diferentes fondos culturales del gobierno que anualmente financian proyectos.
Aparece como evidente que la convivencia social de nuestra comuna difícilmente podrá enfrentar un futuro de progreso integral y participación, sin abordar en forma urgente, masiva y extensiva la problemática del arte y la cultura todavía existente, que impide el desarrollo mas o menos armónico y equilibrado de nuestros ciudadanos, en especial en las distintas poblaciones.
Lo señalado revela la importancia de asumir y crear instancias que respalden las ideas y los proyectos de las distintas agrupaciones artísticas culturales. Pero no solo eso, igualmente importante es el sentido de hacer que esta propuesta de trabajo sea un elemento básico para accionar la participación real de los pobladores en la construcción de una sociedad mas justa y democrática.
Finalmente quiero plantear algunos elementos utópicos que signan la propuesta entre lo que se encuentran :
1.- la creencia en que se puede levantar una propuesta estética en la comuna y validarla en el circuito de cultura nacional.
2.- la creencia en que sosteniendo una postura ideológico-cultural critica y consecuente con la continuidad de la tradición de los últimos años, se puede obtener reconocimiento de la institucionalidad .
3.- la creencia en que basta el esfuerzo de sostener la actividad cultural en la comuna para dar sentido existencial al oficio.
4.- la creencia en que un hipotético proceso de desarrollo y autonomía comunal en lo económico, político y sociocultural acarreará beneficios al trabajo artístico local.
5.- la creencia en que existe hoy posibilidad de establecer un circuito cultural y comunicacional que sirva a los intereses de la comuna .
Si alguna de estas tesis utópicas tienen opción de realizarse, sólo será en un muy largo plazo. Por el momento, los gestores, productores y artistas locales harían bien en esforzarse no sólo en hacer actividades cada vez mejor, sino por comunicar mejor su trabajo en los grandes centros urbanos del país y el extranjero.
La correcta valoración de las potencialidades de la cultura local y una síntesis, de los elementos tradicionales y modernos que coexisten de manera persistente, pueden construir, en el futuro, la base que sostenga la funcionalidad de la creación cultural artística en la comuna. Pero, de momento, está claro que trascender los estrechos límites comunales constituye una necesidad ineludible.
Marco Antonio Ruiz Guzmán
Gestor y Productor Cultural
Presidente Centro Cultural Artístico y del Libro “dalca”
Hoy cuando el país ha entrado en un cambio cultural me parece de suma importancia plantear esta propuesta artística cultural de desarrollo para la comuna que compartimos con en el Centro Cultural Artístico y del Libro “ dalca “. Por ello esta propuesta que insta al conjunto de la sociedad local a hacer de Puerto Montt una ciudad con una imagen artística cultural potente y con un mensaje descentralizador que de prioridad al ámbito de las poblaciones.
Esta es una propuesta que recoge y reconoce el esfuerzo, la experiencia
anteriores, provenientes de los integrantes del mismo Centro y de los distintos sectores -público, privado y de la sociedad civil- que en diversos contextos han abogado por convertir la promoción de la cultura y el arte en una tarea fundamental. En el caso del presente documento, el Centro Cultural, Artístico y del Libro se abrió a la opinión de actores que no están, necesariamente, representados en agrupaciones culturales o instituciones gubernamentales, no son los actores que nos hemos acostumbrados ver durantes estos años, sino que aquellos anónimos artistas que deambulan en las distintas poblaciones, hospitales, canchas de fútbol, en las esquinas, en las construcciones, etc. Aquellos que todavía al parecer no se sienten parte del sistema democrático. Compartieron con generosidad sus aportes y han sido considerados con gratitud.
La acción cultural no debe ser patrimonio de unos pocos sectores o élites, sino que ella recorre la ciudad en su conjunto en cualquiera de sus manifestaciones cotidianas.
Sin cultura no es posible valorar nuestro patrimonio histórico, arqueológico y paleontológico; sin cultura no es posible hacer del turismo un recurso en beneficio de nuestros habitantes; no es posible el crecimiento económico, ni el desarrollo social; no es posible la integración de nuestras apartadas localidades en un destino común.
Sin una cultura social no es posible concebir nuestro futuro.
Igualmente, esta política no pretende partir de cero, sino que es el paso natural después de lo que se ha hecho durante estos años , a través del apoyo de la municipalidad o el aporte importante de los diferentes fondos culturales del gobierno que anualmente financian proyectos.
Aparece como evidente que la convivencia social de nuestra comuna difícilmente podrá enfrentar un futuro de progreso integral y participación, sin abordar en forma urgente, masiva y extensiva la problemática del arte y la cultura todavía existente, que impide el desarrollo mas o menos armónico y equilibrado de nuestros ciudadanos, en especial en las distintas poblaciones.
Lo señalado revela la importancia de asumir y crear instancias que respalden las ideas y los proyectos de las distintas agrupaciones artísticas culturales. Pero no solo eso, igualmente importante es el sentido de hacer que esta propuesta de trabajo sea un elemento básico para accionar la participación real de los pobladores en la construcción de una sociedad mas justa y democrática.
Finalmente quiero plantear algunos elementos utópicos que signan la propuesta entre lo que se encuentran :
1.- la creencia en que se puede levantar una propuesta estética en la comuna y validarla en el circuito de cultura nacional.
2.- la creencia en que sosteniendo una postura ideológico-cultural critica y consecuente con la continuidad de la tradición de los últimos años, se puede obtener reconocimiento de la institucionalidad .
3.- la creencia en que basta el esfuerzo de sostener la actividad cultural en la comuna para dar sentido existencial al oficio.
4.- la creencia en que un hipotético proceso de desarrollo y autonomía comunal en lo económico, político y sociocultural acarreará beneficios al trabajo artístico local.
5.- la creencia en que existe hoy posibilidad de establecer un circuito cultural y comunicacional que sirva a los intereses de la comuna .
Si alguna de estas tesis utópicas tienen opción de realizarse, sólo será en un muy largo plazo. Por el momento, los gestores, productores y artistas locales harían bien en esforzarse no sólo en hacer actividades cada vez mejor, sino por comunicar mejor su trabajo en los grandes centros urbanos del país y el extranjero.
La correcta valoración de las potencialidades de la cultura local y una síntesis, de los elementos tradicionales y modernos que coexisten de manera persistente, pueden construir, en el futuro, la base que sostenga la funcionalidad de la creación cultural artística en la comuna. Pero, de momento, está claro que trascender los estrechos límites comunales constituye una necesidad ineludible.
Marco Antonio Ruiz Guzmán
Gestor y Productor Cultural
Presidente Centro Cultural Artístico y del Libro “dalca”
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